Puñales de filos plateados
en la noche
que robas estrellas
despuntando horizontes,
cuántas noches apuñalaste
mi corazón solitario
de amigos, de amores, ilusiones y fracasos.
Dejaré que el beso del amor
roce mis labios
para cicatrizar las heridas
de mi corazón plateado.
Ana Vega